martes, 26 de julio de 2011

De uso común
(Armadura)

Con el corazón
henchido de cafeína
me desando los ánimos
que a mí mismo
ayer me regalé.

Cualquier clímax
es un porrazo
en potencia.
Primero perplejidad,
después la caída.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

le he dado a comentario impulsivamente y de verdad, Julio, que ahora no sé qué decir. Creo que todo lo has dicho tú. Si la poesía debe golpear, que tampoco lo sé, ha sido POESÍA. Lugares comunes, muy comunes, supongo. Yo le llamo flecos, capas, etiquetas... un buen amigo mochilas. Y sí, tienden a solidificarse en coraza, qué pena
.

JulioBCN dijo...

No sé quién eres, pero sí, la poesía debe golpear con amor o con violencia, pero debe golpear. Gracias por el comment.